sábado, 18 de abril de 2015

Introducción

“Alzheimer junto a la tecnología”.

El Alzheimer es una peligrosa enfermedad no curable neurodegenerativa, es decir, que a través del tiempo se va volviendo peor el estado del paciente, pues hay pérdida de memoria, cambio de comportamiento, etc. Es una enfermedad muy cruel y común ya que muchas veces los familiares del paciente lo ven como un estorbo por sus deficiencias mentales, cabe mencionar que según estudios de la OMS existen 47,5 millones de personas en el mundo que padecen demencia y el Alzheimer es la causa más común de demencia entre un 60% y 70% de los casos. 

Existen dos diferentes tipos de tratamientos: los farmacológicos y los no farmacológicos. Como su nombre lo dice los farmacológicos son a través de medicamentos; los doctores empiezan recetando dosis bajas y la van aumentando gradualmente dependiendo la toleración del paciente hacia el medicamento. Este tratamiento es diferente con cada paciente y puede que tengan efectos secundarios severos como digestivos, hepáticos, etc. Depende mucho el tipo de medicamente y a que paciente se les implementa. Se ha provocado que las Terapias no farmacéuticas (TNF) son mejores en ciertos aspectos que las farmacéuticas. Por ejemplo estudios muestran que hay una mejora del estado mental y ausencia de la progresión de la enfermedad, pero no parecen mejorar en algunos aspectos, como la independencia en las actividades de la vida diaria.

Los últimos avances de la robótica en la medicina van más allá que la curación física, como son los robots quirúrgicos, robots para la discapacidad, etc. Ahora se integran los robots terapéuticos. ¿Cómo un robot puede ayudar a las personas psicológicamente?, pues buen, estos robots han sido creados para hacer compañía a personas con problemas psicológicos (sobre todo a las personas con demencia). Muchas empresas han desarrollado diversos “juguetes” inteligentes con un efecto terapéutico similar al de la zooterapia.